domingo, 14 de febrero de 2016

Sin querer queriendo...

Hay cosas que uno no tiene idea por que las hace. Solo se hacen y ya. Bueno, esta historia es una de esas.
Llevaba algunas horas ya, luego de haber llegado a Chos Malal y salí a recorrer el pueblo con la intención de encontrar alguna señal de wifi para comunicarme con mi hermana. Luego de la llamada, seguí recorriendo la plaza en la que estaba y en eso me encuentro con unos chicos de una comparsa que tocaban (según yo), sólo por el gusto de tocar. Me acerqué a ellos y me pasaron un instrumento para que tocara. Aun que mi desempeño no fue el mejor (creo yo), los chicos me vieron bastante entusiasmado y me invitaron a un ensayo a la tarde del otro dia.

Llego al ensayo y me pasan otro instrumento, uno parecido a un pandero, pero que no recuerdo bien como se llamaba, y me dicen que me aprenda la música de la batucada. Sorprendentemente me salía mucho mejor de lo que pensé y al final me aprendí el repertorio. La cosa es que me dicen: "Bueno che, mañana llegas con ropa negra. Así es. Mañana tocas con nosotros en el carnaval". Medio asustado, pero sin demostrar nada, les dije que si, claro! Allí estaría.

Dia del ensayo

El dia siguiente fue una locura. Todos corriendo nerviosos! Que me falta esto, que pintame aquí, que ya vamos a salir... Jajajaja yo estaba esperando, no menos nervioso, la hora para salir a tocar. Hasta que llego el momento de la verdad y toda la ansiedad se disipó. No quedaba otra que disfrutar. Fue una fiesta maravillosa con gente maravillosa también.

Y hasta que por fin toqué en una comparsa. :D

Los chicos de la batucada

Con Guillermo

Algunas de las chicas de la comparsa. Imposible concentrarse!!

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